No las tóxicas.
Ya te he comentado otras veces que para esas personas que están en tu entorno y te perjudican, igual es momento de despedirse y seguir tu camino.
Pero hay otro tipo de relaciones.
Otras que son personas a las que quieres, que tienen buen fondo y valores, pero que relacionarte con ellas te estresa. A veces, incluso, te agota.
Porque discutís, porque tal vez no estáis o no está en su mejor momento.
Bien.
Pues te propongo tres mentalidades con las que me gustaría que conectes cuando te relaciones con estas personas:
“Recordar su intención”
En momentos de confrontación, uno puede creer que el otro busca hacer daño e ir en tu contra.
Podrías pensar, cuando estás enfadado o enfadada, que lo que hacen es porque no son buena gente.
Pero en el caso de ser gente no tóxica, como te comentaba al principio, puedes considerar que esa persona actúa lo mejor que sabe y puede.
Que igual, en el momento en el que está, no sabe hacerlo mejor.
Y poner esta mentalidad a quien libera del exceso de tensión interna es a ti.
“No es asunto tuyo”
Muchas veces puede haberte molestado cómo piensa esa persona, sus ideas, a quien vota o defiende, que haya tomado una decisión que consideras estúpida, que utiliza un vocabulario y no otro, que no ve algo que a ti te parece obvio, etc.
Lo entiendo, pero su ideología, sus decisiones, lo que haga, es su business, no el tuyo.
Reconocer que tú tienes que encargarte de lo tuyo y no de los demás es liberador.
Y eso no es egoísmo.
Uno aporta más a los demás desde el estar bien que haciendo suyo los problemas de otro.
“Te ayuda a crecer”
Si estuvieses rodeado de auténticos seres de luz, que al estar con ellos siempre sientes una paz profunda que da gusto, sería ideal, pero por otro lado, quizás costaría más desarrollarse.
Que haya algunas personas más retadoras en tu entorno, ayuda a que desarrolles la habilidad de estar en paz con independencia de lo que ocurra fuera de ti… siempre que decidas enmarcar a esas relaciones como una oportunidad de crecimiento, claro.
Para aprender a navegar, necesitas algo de oleaje y pasar por alguna tormenta, no un mar en calma.
Y sobre desarrollar habilidades que te permitan multiplicar tu paz sin dejar de ser productivo, doy claves todos los días en mi newsletter gratuita. Puedes suscribirte aquí abajo.
Por tus relaciones retadoras,
Manuel Umbert.